El próximo 27 de enero es el Día Internacional del Holocausto. Millones de personas fueron víctimas del régimen nazi: alemanes, rusos, polacos e incluso españoles. El único delito fue ser diferente. Por padecer una discapacidad o ser homosexual; por pertenecer a los pueblos judío o gitano; por ser masón, objetor o pentecontísta, por ser comunista o disidente... había un billete hacia el exterminio. Cualquier persona, sin distinciones. Recordarlo debe servir para evitar que vuelva a ocurrir.
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13 comentarios:
En Alemania se hace todo lo posible para que estos crímenes no se vuelvan a dar nunca más.
Se tiene muy presente este tema. Todos los días un canal de televisión pasa datos históricos sobre los horrores de la II Guerra Mundial. Y al movimiento nazi se le combate lo más que se puede para que los jóvenes tomen conciencia que no se debe hacer distinciones de ninguna clase entre los seres humanos.
Te djeo un cordial saludo desde Berlín.
Aquello fue un claro ejemplo de cómo se puede hacer enfermar a una sociedad desde un posicionamiento político atroz y bárbaro, que lleva por bandera el asesinato o la eliminación del diferente. Nosotros, a una menor escala, lo padecimos aquí.
Un saludo
recordar para que no se vuelva a repetir :D
Simplemente por el hecho de ser diferente ya se ganaba uno ser candidato al exterminio. Y los pobres rusos que se libraron, después se encontraron en propia casa con otro energúmeno de marca mayor.
Un saludo.
Ojala nunca se olvide para que no se vuelva a repetir. Aunque....... locos sigen existiendo. Un fuerte abrazo.
El único delito era ser diferente...
6 millones de judíos, 2 millones de eslavos, 1 millón de gitanos...
Más los que nunca sabremos.
Saludos
Por desgracia todavía se sigue matando por ser diferente; por no practicar la misma religión, por no ser de la misma raza, por considerarse de una cultura diferente e independiente, por no practicar el "pensamiento único". Y esto ocurre en Oriente y Occidente, en Irán y en Estados Unidos, en Israel, donde un Pueblo es perseguido y negado en su existencia, masacrado día a día, en África, que se persiguen y matan por pertenecer a diferentes tribus, en América del sur, en donde se persigue y extinguen pobladores de la Amazonía para la explotación de sus recursos por quienes no son sus dueños, y así un largo etcétera.
No olvidemos que el Holocausto sigue y que no se trata de que no vuelva a ocurrir, sino de pararlo.
Saludos, y un abrazo.
No sólo éso debemos recordar, hay miles de "pequeños" holocaustos, que se nos olvidaron por no tener ésas dimensiones.
Cada día habría que "celebrar" una fecha recordatoria.
Saludos.
...celebro ese reconicimiento a esos seres humanos que vieron truncados sus sueños, su verdad y su vida por ser distintos...en manos de ignorantes insatisfechos. Pero lo que más pena me da es que aún hoy seguimos levantando aquellas alambradas, aunque invisibles, en cualquier Sociedad del mundo, ya sea con la humillación, el desprecio o los crímenes.
Un abrazo.
Es muy sano para el alma perdonar, pero nunca hay que olvidar, porque es la única forma de que estos terribles actos no se repitan. En momentos de crisis como el que vivimos es cuando hay que fomentar más la igualdad y la tolerancia. Gracias como siempre Jose por recordarnos la historia.
Gracias José Antonio por traernos la historia a tu blog, que en este caso fué un hecho horrible que es bueno recordar para estar alerta y no dejar que el más insignificante atisvo de intolerancia pueda echar raices.
He pasado varias veces por aquí y al ver que no actualizabas me preguntaba si estarias mal. Hoy me he alegrado al ver tu entrada.
Te echo a faltar en el blog de Josefa. Un beso con afecto.
Homenajeemos a las personas que murieron injustamente.
Deseemos que hechos así no vuelvan a repetirse nunca más.
Un abrazo
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